Tura Ayaman por la lluvia y la cosecha: Fotografías de Orlando “Jesucristo” Pérez, yFragmentos del color. Acumulaciones retinales, de María Fabiana Zapata se titulan las muestras organizadas por el Museo de Arte Popular que inaugurarán en el Museo de Barquisimeto, este sábado 16 de noviembre a las 4:00 pm en los espacios de la referida institución larense, ubicada en la carrera 15, con calles 25 y 26, en el casco central de la ciudad de los crepúsculos.
Al respecto, Laura Carrera y Luis Miguel Rodríguez, directora y subdirector del Museo de Arte Popular, respectivamente, indicaron que las exhibiciones estarán conformadas por 46 fotografías en el caso de Tura Ayaman por la lluvia y la cosecha y por una gran instalación participativa.
En lo que refiere a la propuesta de Pérez, “Tura Ayaman por la lluvia y la cosecha nos sumerge en la enigmática y mágica danza ritual ancestral de Las Turas, considerada como la más pura expresión musical indígena que aún se conserva en Venezuela”.
Indicaron que el fotógrafo en su proyecto se acerca a los poblados de los Municipios Federación, del estado Falcón y Urdaneta, del estado Lara, donde en contacto con las comunidades descendientes de las etnias Ayaman y Jirahara, escenifican anualmente esta danza ritual donde se pide y agradece a la Madre Naturaleza y a los espíritus benefactores por las cosechas y los beneficios recibidos. “El registro fotográfico nos sumerge en los escenarios, en los personajes y caracterizaciones, en sus atavíos e instrumentos ritualísticos y en los altares plenos de los frutos que nos regala la Madre Naturaleza”.
Respecto a la propuesta de Zapata explicaron que a través de esta “instalación participativa, el espacio expositivo vacío se configura y puebla a través de formas abstractas y geométricas de color, líneas, grafías y materiales diversos”.
Indican que la artista ha explicado que esta obra es un espacio tridimensional donde el espectador se halla inmerso y supeditado a diversidad de estímulos visuales, táctiles y cinéticos. “María Fabiana Zapata nos ofrece en este espacio del Museo de Barquisimeto una obra abierta, inacabada, participativa; una instalación efímera de múltiples sensaciones y percepciones”.
Ambos se despidieron diciendo que la invitación es para que el público “nos acompañe ese día y recorramos en un mismo lugar, dos creaciones ancestrales y contemporáneas donde el espacio, el movimiento, el momento y lo efímero están entrelazadas por la fe, la creencia, lo colectivo y el tiempo”.
Fuente: Teresa Quilez.