Qué es el qué, una pregunta que reflexiona el personaje de esta novela. Histórica por cierto, que juega con los tiempos y donde el lector siente a un personaje real, palpable, que vivió en carne propia la guerra civil sudanesa que cobró tantas vidas, y por momentos te lleva a imaginar un clon del holocausto en nuestros días. Una muerte tras otra, una perdida, una maldad humana por racismos inocuos y absurdos. Esperanza dentro del lodazal. Achack Deng es un sudanés, unos de los Niños Perdidos, nacido de buena cuna con un padre influyente, las batallas civiles, las muertes y la incursión de países externos llevan a estos a desertar, en un camino difícil por desiertos. Hambre, sed, enfermedades, alucinaciones y muerte se consiguen en el cruento camino. A su vez se relata en tiempo real la difícil vida por el racismo americano y la indiferencia de los vecinos en Norteamérica, viviendo un secuestro en su propia casa, un desprecio desde los más adultos hasta los púberes. Un destino inevitable donde se intenta sobresalir sin molestar a nadie.
Así mismo la novela muestra la profundidad espiritual de los sudaneses, su respeto, sus valores, su moral y ética. Una novela entretenida pero conmovedora que lleva a los lectores a reflexionar sobre los patrones conductuales y estereotipos aberrantes que a veces se copian porque la cultura que lo circunda así lo hace.
La novela basada en un hecho real, muestra a un joven luchador, a un sudanés que traspasó las fronteras sociales, raciales e históricas para adentrarse, crecer y hacerse un hombre que ayudara como le ayudaron, Qué es el qué es la historia de una lucha de un hombre con un gran corazón, narrada por la pluma entretenida y elocuente de Dave Eggers
“Durante toda la novela se percibe que, cuando se trata de hablar del misterioso “Qué”, en realidad se habla sobre la capacidad para explicar nuestras historias, de rendir testimonio. Qué és el qué nunca nos devolverá a los dos millones de muertos, pero lograremos recordarlos si la historia de Deng se cuenta una y otra vez. “Creo que tienes el don de hacer a los otros ver”, le dijo un sacerdote a Deng en Etiopía. “Creo que serás testigo de algo y que con ello aprenderás”. Lo mismo se podría aplicar al escritor que ha canalizado a Deng en esta obra inolvidable, bella y extraña.” John Freeman, presidente del National Book Critics Circle