En los espacios de la Fundación Casa Santa Ana, en Ciudad de Panamá, se presentó la exposición colectiva “Life, Still” (Vida, Todavía), en la que 32 artistas internacionales exploraban las complejidades de la vida a través de un solo tema: las flores.
Javier Ruiz- Bodegóm con Flores
ESPAÑA
Cargadas de significados profundos las flores han sido desde la antigüedad, un motivo recurrente en el arte, al punto que en muchas culturas han simbolizado la renovación, la fragilidad de la existencia además de otros aspectos de la vida misma. Este imaginario ha logrado evocar en el público emociones como la alegría, la nostalgia o la tristeza, lo que ha permitido añadir una dimensión emocional y espiritual a cada representación. Sin embargo, en el arte moderno y contemporáneo, el simbolismo de la flor se ha expandido, hasta abordar temas como la identidad, la feminidad e incluso problemáticas sociales y ambientales. En la actualidad, las flores han llegado a convertirse en un símbolo de resistencia y esperanza que nos invita a reconectarnos con la naturaleza.
El título de la exposición, «Life, Still», o “Vida, Todavía”, juega de manera ingeniosa con la acostumbrada denominación de “Still Life” o “Naturaleza Muerta”. Por cuanto, mientras que esta última categoría artística sugiere inmovilidad y muerte, el título de la muestra invita al espectador a una relectura: dado que, a pesar de su fragilidad, la vida persiste. Esta dualidad entre lo efímero y lo duradero se convierte en el eje central de la exposición, donde las flores representan no solo la belleza pasajera, sino una vitalidad que continúa existiendo incluso en los momentos de quietud.
Los 32 artistas participantes, desafían la concepción tradicional de la flor como un mero elemento decorativo, para ofrecer una variedad de perspectivas y técnicas. Al integrar elementos conceptuales, sociales y emocionales, la propuesta curatorial expande los límites de lo que podemos esperar de un motivo tan cotidiano, por lo tanto, en «Life, Still», las flores, símbolo de belleza y transitoriedad, superan su rol estético habitual, para invitarnos a reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza y la experiencia humana.
Liset Castillo
BÉLGICA
Así, la exposición no solo destaca la relevancia atemporal de las flores en el arte, sino que adicionalmente logra reconfigurar el tema desde enfoques innovadores. A través de una mirada interdisciplinaria, «Life, Still» termina convertida en una experiencia visual y sensorial que provoca una reflexión profunda que invita al espectador a reconsiderar su relación con la vida, la naturaleza y el arte contemporáneo.
En definitiva, «Life, Still» celebra la continuidad de la vida a través de lo efímero, transformando lo cotidiano en un espacio de introspección y, al hacerlo, nos recuerda que, a pesar de las adversidades y la fragilidad de la existencia, la vida sigue.
Caroline Larsen _ Quantum, 2022
USA
Between Fragility and Vitality: The Flowers in ‘Life, Still’.
In the spaces of Fundación Casa Santa Ana, in Panama City, the group show titled “Life, Still” was presented, where 32 international artists explored the complexities of life through a single theme: flowers.
Loaded with profound meanings, flowers have been a recurring motif in art since ancient times, to the point that in many cultures they have symbolized renewal, the fragility of existence, as well as other aspects of life itself. This imagery has managed to evoke different emotions in the public, such as joy, nostalgia, or sadness, which have added an emotional and spiritual dimension to each representation. However, in modern and contemporary art, the symbolism of the flower has expanded to address themes such as identity, femininity, and even social and environmental issues. To the point where flowers today have become a symbol of resistance and hope that invites us to reconnect with nature.
The exhibition’s title, «Life, Still,» cleverly plays with the usual denomination of «Still Life», (literally “Dead Nature”). While the latter artistic category suggests immobility and death, the title of the exhibition invites the viewer to reinterpret it, because despite its fragility, life persists. This duality between the ephemeral and the enduring becomes the central axis of the exhibition, where flowers represent not only fleeting beauty but also a vitality that continues to exist even in moments of stillness.
The 32 participating artists challenge the traditional conception of the flower as a mere decorative element, offering a variety of perspectives and techniques. By integrating conceptual, social, and emotional elements, the curatorial approach pushes the boundaries of what we could expect from such an everyday motif. Thus, in «Life, Still,» flowers as symbols of beauty and transience, surpass their usual aesthetic role, inviting us to reflect on our relationship with nature and the human experience.
This way, the exhibition not only highlights the timeless relevance of flowers in art but also manages to reconfigure the theme through under the light of new approaches. Therefore, through an interdisciplinary lens, «Life, Still» becomes a visual and sensory experience that not only provokes a deep reflection, but also invites the viewer to reconsider his relationship with life, nature, and contemporary art.
Ultimately, «Life, Still» celebrates the continuity of life through the ephemeral, transforming the ordinary into a space for introspection and, in doing so, reminds us that despite adversities and the fragility of existence, life goes on.
Cesar Sasson
Ciudad de Panamá – Panamá
Octubre de 2024