AGRADECIMIENTO A LA UNICA
“El saber, después de la virtud,
es lo que eleva a un hombre”.
Joseph Addison (Londres 672-1719)
La Universidad Católica Cecilio Acosta fue fundada en 1983 por el padre Gustavo Ocando Yamarte, en el núcleo educativo Niños Cantores del Zulia ubicado en la urbanización La Paz. Una obra reconocida mundialmente, identificada con el emblema del ave cantora. Esa casa de estudios, UNICA, me dio la oportunidad de ser alumno fundador en la carrera de música. Yo recién había egresado del Colegio Gonzaga dirigido por los padres jesuitas, como bachiller docente. En ese momento, la Universidad Católica Cecilio Acosta no tenía sede, se construyeron tres amplios salones ubicados detrás del Teatro NC y allí veíamos clases los estudiantes pioneros de las carreras: Artes plásticas, Comunicación social y Música. Nuestro decano fue Luis Arconada Merinos, un sabio de estilo renacentista, ejecutante del órgano de tubos.
Las pruebas de selección para los 1500 aspirantes que asistimos al llamado del Diario La Columna, las dirigió el prestigioso psicólogo cubano Eduardo Habach, se desarrollaron durante tres largos días, fueron jornadas extenuantes. La tabulación de las mismas la realizó la Universidad de Hato Rey en Puerto Rico. Dos semanas después llegaron los resultados, y tuve el honor de encontrarme entre los 90 seleccionados para comenzar la historia de ese importante claustro, Alma Máter creada en el corazón cultural del Zulia. Su primer rector fue el Doctor Wintila Pérez Romero, el séptimo y último hijo del matrimonio del polígrafo Udón Pérez y Delia Romero.
Exactamente 30 años después comencé mi postgrado en la misma casa de estudios superiores, la que ahora cuenta con una amplia sede, con miles de alumnos, y una buena oferta académica: de forma presencial, y a distancia. Esta vez, cursé la “Maestría en Comunicación y Desarrollo, Mención Tecnología de la Información y Comunicación (TIC) para el Desarrollo Humano”, de forma presencial, con una duración de dos años intensos.
Fue un placer compartir cada sábado en sus laboratorios virtuales los interesantes seminarios, dictados por excelentes profesores, como Darcy Fernández, Carmen Belandría, Elvy Monzant, Fernando Villalobos, María Alejandra Montiel, Zulma Ortíz, Carmen María Prieto (+) Any Paz y Silvia Romero, entre otros intelectuales y buenos investigadores.
Mi tesis de grado la titulé “Influencia de las TIC en la identidad musical de los marabinos”, una investigación descriptiva y transeccional sobre cómo las nuevas tecnologías de la comunicación han moldeado la conformación identitaria de los jóvenes marabinos. La delimité en una población etaria comprendida entre los 18 y 25 años de edad, pertenecientes a las parroquias Santa Lucía y Juan de Ávila. Esa investigación calificada con 20 puntos por el jurado, pronto estará publicada en formato de libro impreso, gracias al apoyo Fundación Beltway, fundación cultural panamericana. Será un texto para la consulta de los estudiantes e investigadores interesados en ese tema tan actual, dinámico y futurista: Las TIC y sus efectos.
El pasado 4 de mayo, en las instalaciones del Centro de Arte Lía Bermúdez, se realizó el acto de grado académico correspondiente a la promoción XLI de la Universidad Católica Cecilio Acosta. Contó con la presencia de Monseñor Ubaldo Santana, el canciller de la UNICA, de Monseñor Porres Cardozo, el polémico arzobispo de Mérida, quien recibió el Doctorado Honoris Causa. El Rector Ángel Lombardi junto a las autoridades rectorales. Con la presencia de cientos de graduandos en diferentes carreras y sus eufóricos familiares, a sala llena y con una imponente coral universitaria, recibí el título de manos de mi esposa la Doctora Marisela Árraga de Montiel, profesora titular de la Universidad del Zulia, gracias a la venia concedida por el Rector Lombardi Lombardi, nuestro amigo desde los tiempos del Colegio Gonzaga, donde estudiaron sus diez hijos.
Fue un acto emotivo, lleno de significado académico, con excelentes interpretaciones musicales, en el hermoso recinto del CAMLB, enclavado en la Plaza Baralt, ahora rescatada por la gestión del Gobernador Arias Cárdenas, una locación hermosa, digna, que eleva a la ciudad puerto.
En sus palabras finales el Doctor Ángel Lombardi destacó:
“Ustedes son una promoción que bregó con las adversidades y las superó, pasaron por guarimbas, apagones, sequía extrema, racionamiento de agua, en fin; las dificultades quedaron atrás, porque hoy reciben con mucho mérito su título. Esto demuestra que la sociedad no se detiene, no debe detenerse ante nada. Algunas universidades europeas entregaron títulos en medio de guerras y conmociones sociales, situaciones mucho peores que las que hemos vivido en Venezuela.
Sigan adelante; el futuro es de ustedes”.
La Universidad Católica Cecilio Acosta sigue haciendo honor a su lema: “Excelencia Académica y Compromiso Social”, así lo viví, así lo demostró una vez más.
Quiero dejar en forma notoria y pública, mi gratitud con la UNICA, con su departamento de postgrado, con sus excelentes catedráticos. Sobre todo con los compañeros de mi corte, los que durante dos años me apoyaron y estimularon a culminar esa investigación e hicieron placentera la experiencia. En especial, agradezco a mi familia, porque en definitiva, nadie logra nada solo, todos los logros en la vida van respaldados por la familia, por los amigos más raigales, por los compañeros leales. Son logros de pequeños colectivos a los que cada uno pertenecemos.
Como lo afirmó de forma certera el escritor y líder político inglés Joseph Addison: “El saber eleva al hombre”. El estudio, la lectura, la escritura disciplinada; son un compromiso de vida para mi, eso le da sentido a mi existencia. En eso siempre estaré activo, con mi gratitud plena a todos.
León Magno Montiel
@leonmagnom