Cartografía de sueños: Rosana Faría, 25 años dibujando historias para niños
Mucho más que una exposición de ilustración
En la Casa Vieja de la Hacienda La Trinidad, espacio expositivo de este parque cultural, se han presentado una serie de exposiciones de distinta índole, que van desde teatrinos hasta instalaciones, desde arte religioso hasta contemporáneo, desde fotografías hasta LP de rock venezolano. Ha llegado el momento de darle un espacio a la ilustración literaria y es un honor para nosotros contar con Rosana Faría para dar pie a este nuevo género de exposiciones con la inauguración de Cartografía de sueños: 25 años dibujando historias para niños.
Las primeras ilustraciones de libros infantiles datan del siglo XVII, lo que nos da a entender que no son nada nuevo, sin embargo las técnicas que ahora se emplean y la conexión que crea la ilustración con el texto sobrepasa la función decorativa y se convierte según la profesora Beatriz López Romero en “una forma artística capaz de establecer una amplia comunicación, y dejar una huella o un recuerdo muy profundo en la conciencia del niño.”
La “Niña bonita” de Rosana Faría, así como sus ilustraciones de “El Adivino”, “El libro negro de los colores”, “Un diente se mueve”,“¡Splash!”, “Pin Uno Pin Dos”, “La Gota gorda” o “Papageno y la flauta mágica” son de estas ilustraciones que se quedan en nuestra memoria, así como en la de los más pequeños, por lo eficaz de su interpretación de los textos, su destacable labor técnica y el amor que tiene por su trabajo.
Han pasado 25 años desde que Rosana ilustró La alegría de pintar de Rafael Arráiz Lucca en 1989 (Mención de honor en el X Salón del libro ilustrado de la Biblioteca Nacional) y desde entonces ha tenido una labor incansable, la cual está reflejada en Cartografía de sueños, exposición que hace gala de su talento como ilustradora, mutante e innovadora, a través de los dibujos de los distintos cuentos en los que ha participado.