El Centro de Bellas Artes Ateneo de Maracaibo (CBA) y el Centro Social Cultural y Deportivo Hebraica, de la mano de Jacqueline Goldberg, traen a la ciudad por tercer año consecutivo la séptima edición del Festival de Cine Judío.
Este Festival se caracteriza por traer películas de excepcional calidad que usualmente muestran las muy diversas facetas de las tradiciones, cultura, costumbres del judío y del judaísmo.
Para esta ocasión se proyectarán dos películas con entrada gratuita, a las 7:00 pm. El martes 3 de diciembre Maracaibo disfrutará de la premiada película “Wakolda” o “El médico alemán” como le llaman en España.
“Wakolda” (2013) está basada en la novela homónima de la directora argentina Lucía Puenzo, conocida por películas como “XXY” y “El niño pez”. En esta ocasión Puenzo cuenta un drama de 1960, cuando en una desolada región de la Patagonia, un médico alemán conoce a una familia que lo hará revivir sus obsesiones de pureza y perfección, en especial Lilith, adolescente demasiado pequeña para su edad.
Desconociendo la verdadera identidad del médico, la familia lo acepta como huésped y progresivamente se verá seducida por sus modos, distinción, saber científico y sus ofertas; hasta que descubren que han estado conviviendo con uno de los más grandes criminales de la historia
Este film protagonizado por Natalia Oreiro, Diego Peretti, Elena Rorger y Alex Brendemühl fue muy bien recibido en la sección “Una cierta mirada” del sexagésimo sexto Festival de Cannes. También participó en los festivales de cine de Lima, Montreal, San Sebastián y Noruega, entre otros.
La segunda proyección del Festival de Cine Judío está pautada para el miércoles 4, con el largometraje “El mundo es raro” (Haolam Mats’hik, 2012), de Shemi Zarhin. Una comedia – dramática de Israel que retrata la ciudad de Tiberias, la cual se transforma en tierra de cuentos de hadas, donde surge una apasionante historia de duelo, la nostalgia y el poder de la familia. Protagonizada por una cincuentena de personajes, cada uno tratando de ser el héroe de su propia historia, escapando de la desesperación y buscando consuelo y esperanza entre la realidad y la imaginación.
Fuente: Centro de Bellas Artes.