Una obra «incontinuable», que impulsó al español en el mundo y a nuevas generaciones de escritores, es el legado que escritores y artistas reconocen de Carlos Fuentes, quien este miércoles cumple un año de haber fallecido a causa de una hemorragia digestiva.
“Lo que hizo Fuentes es incontinuable. Él lo sabía y sus lectores también lo sabemos. Es una pérdida irreparable que no dejó un vacío, sino un espacio lleno que solo él podía ocupar”, dijo a
el escritor Xavier Velasco en febrero pasado.
Desde que murió, a los 83 años, el nombre de Carlos Fuentes ha sonado varias veces en los eventos más importantes de la comunidad literaria en los países de habla hispana.
La Feria Internacional del Libro de Guadalajara y la del Libro del Palacio de Minería en el DF, por ejemplo, le dedicaron sus ediciones más recientes; el gobierno de México creó un premio que lleva su nombre para reconocer a los escritores en español que hayan enriquecido el lenguaje y el Instituto Cervantes de España lo nombró “embajador permanente del territorio de La Mancha”.
Escritores de habla hispana consideran a Fuentes un “embajador” de la literatura latinoamericana en el mundo, labor que permitió el desarrollo de su generación y que inspiró a las que le sucedieron.
“Si algo nos enseñó fue a nadar solos”, dijo Velasco, ganador del premio Alfaguara 2003 por su novela Diablo Guardián y quien se considera discípulo de Fuentes y del peruano Mario Vargas Llosa.
Carlos Fuentes estudió Derecho en la UNAM, Economía en Ginebra y luego se dedicó de lleno a la literatura, donde formó parte del Boom latinoamericano junto a escritores como el colombiano Gabriel García Márquez y Vargas Llosa.
“(Fuentes) leyó vorazmente la mejor literatura de su tiempo, aprovechó sus enseñanzas y las adoptó a su mundo y a su personalidad (…). Escribir fue su manera de vivir”, aseguró Vargas Llosa el pasado noviembre, cuando recibió el primer premio Carlos Fuentes, otorgado por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (Conaculta).
“Era un hombre que iba adquiriendo una geografía múltiple. Era un abrazo de todas las culturas”, señaló Juan Cruz, director adjunto de el periódico El País, cuando se le preguntó el significado de Fuentes como “embajador” de la literatura.
Fuentes fue un eterno viajero. Nació en Panamá en 1928, por el trabajo de su padre, un diplomático mexicano. En sus primeros 20 años cambió de residencia de Suiza a Estados Unidos, Ecuador, Uruguay, Brasil, Chile y Argentina. En los últimos años de su vida, dividió sus estancias entre México y Francia, donde permanecen sus restos.
El escritor, el cineasta, el artista
Carlos Fuentes escribió 23 novelas, más de 10 cuentos, más de 20 ensayos, cinco obras de teatro y un libreto para ópera, sin embargo, además de la escritura y en la política, como diplomático, Carlos Fuentes también incursionó en el cine y las artes plásticas.
En el llamado séptimo arte realizó siete guiones, pero destacaron dos que trabajó junto a García Márquez, los de las cintas El gallo de oro (1964) y Tiempo de morir (1965).
“El cine fue su amor platónico. Le daba la distancia fascinante en que todo es mejor, la belleza es más bella, el erotismo más fascinante”, dijo la actriz Diana Bracho en noviembre de 2012, quien dice que conoció a Fuentes mientras este recorría los foros de los estudios Churubusco en 1972.
En el arte, Carlos Fuentes escribió un ensayo en el que hace una crítica de varios artistas como Rembrandt, Fernando Botero, Diego Rivera, Frida Kahlo, Rufino Tamayo y José Luis Cuevas. “Es su libro más secreto, quizá porque pesaba cuatro kilos y tenía 500 páginas”, dijo el artista Vicente Rojo sobre el texto Viendo visiones, editado por el Fondo de Cultura Económica en 2003.
“Estas son las visiones de Fuentes que nos revelaron el gran teatro que es el arte en el mundo”, señaló Rojo a CNNMéxico en 2012 en un análisis sobre la mirada artística del escritor.
Como parte de las actividades por el primer aniversario luctuoso del escritor mexicano, Vicente Rojo montó la exposición Carlos Fuentes, él mismo en el Palacio de Bellas Artes, con setenta fotografías procedentes de diversas colecciones que mostrarán la vida pública del intelectual mexicano, su vida personal y familiar y una serie de retratos del escritor.
También en Bellas Artes, este 19 de mayo, se celebrará la mesa redonda El universo de Carlos Fuentes: homenaje a un año de su fallecimiento, en la que participarán los escritores Héctor Aguilar Camín, Gonzalo Celorio y Hernán Lara Zavala.
Fuentes recibió varios premios internacionales en vida, entre los que destacan el Cervantes (1987), el Príncipe de Asturias de las Letras (1994) y varios Honoris Causa entregados por distintas universidades del mundo. En 2008, también recibió la distición española Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica.
«Fue el mejor embajador de México en el mundo. Cuando viajaba se llevaba a México y de lo que escribió fue de México (…) No hizo tanta ficción como su propia realidad», así lo describió Elena Poniatowska tras su muerte en 2012.
Por Javier Rodríguez Labastida
Fuente CNN México.