Por primera vez, la generación que conforma el Programa Académico Orquestal de la Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela toca esta obra capital del legado de Mozart. En esta oportunidad, la orquesta comparte escenario con los solistas Samia Ibrahim (soprano) Katiuska Rodríguez (mezzosoprano) y Álvaro Carrillo y la Coral Nacional Juvenil de Venezuela.
Wolfang Amadeus Mozart es uno de los nombres ineludibles en la historia de la humanidad: su música se hace cada vez como si fuera la primera y en cada época tiene algo que decirnos, no sólo sobre el pasado, sino sobre el presente. Este sábado, 03 de noviembre, gracias a la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, a la Coral Juvenil Simón Bolívar de Venezuela y a solistas como Samia Ibrahim (soprano) Katiuska Rodríguez (mezzosoprano), Robert Girón (tenor) y Álvaro Carrillo (barítono), todos dirigidos por el maestro Gregory Carreño, sonarán las notas de lo último que Mozart escribió sobre un pentagrama: su Réquiem.
El concierto se llevará a cabo, a las 5:00 pm, en la Sala Simón Bolívar del Centro de Acción Social por la Música, ubicado en el Boulevard Amador Bendayán de Quebrada Honda, Los Caobos (frente a la Casa del Artista y a media cuadra de la estación Colegio de Ingenieros del Metro de Caracas). La entrada al concierto es gratuita.
Con el Réquiem de Mozart no hay escapatoria: el espectador queda atrapado desde la primera nota, se envuelve en la melancólica melodía en re menor, en los textos en latín dotados de una música tan expresiva que no hace falta entender todas las palabras. Durante una hora, ritual que hacen coro, orquesta y solistas recorre un acto litúrgico dividido en 8 partes que sigue el siguiente orden: la Introducción, el Kirie eleison, la Sequentia (que tiene pasajes tan conmovedores y disímiles como “El Diesi rae” y “Lacrimosa”), el Offertorium, Sanctus, Benedictus, Agnus Dei y Communio.
Wolfang Amadeus Mozart escribió esta obra con la convicción de que sería su última creación y cantaría en su propio funeral. No se cantó en su funeral pero sí fue lo último que escribió, pues murió en 1971 antes de terminarla. Dejo buena parte sobre la partitura y el resto fue escrito por su discípulo: Franz Xaver Süssmayr. Buena parte de la obra está protagonizada por la Coral Nacional Juvenil de Venezuela que, dirigida por Lourdes Sánchez, ha comenzado a dar sus primeros pasos internacionales con gran éxito.
Podría parecer en una primera lectura que la obra sólo remite a la aflicción de la muerte, pero para el maestro Gregory Carreño, este acto litúrgico basado en textos bíblicos que refieren a rituales mortuorios, no es una misa para difuntos: “es una obra que encuentra sus raíces justamente en la vida, en su drama. Lo que envuelve el Réquiem de Mozart es una fuerza vivencial. Para mí es un Réquiem de vida eterna. Lo que el genio Mozart nos dejó fue una joya que atestigua sus vivencias, sus carencias, su idea de la vida después de la vida. Tanta fuerza, tanto dinamismo no puede hablar de otra cosa sino de la vida”, señala el director, quien es uno de los fundadores de El Sistema y, actualmente lleva adelante el Núcleo de Los Teques.
El concierto forma parte de la programación 2012: El Sistema por la Paz, que este año ha llevado adelante el Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela, perteneciente a la Fundación Musical Simón Bolívar, adscrita a la Presidencia de la República.
Coordenadas
Sábado, 03 de noviembre
Hora: 5:00 pm
Réquiem(Wolfang Amadeus Mozart)
Sala Simón Bolívar. Centro de Acción Social por la Música. Boulevard Amador Bendayán de Quebrada Honda, Los Caobos.
Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela
Director: Gregory Carreño
Coral Nacional Juvenil Simón Bolívar de Venezuela
Samia Ibrahim (soprano), Katiuska Rodríguez (mezzosoprano), Robert Girón (tenor) y Álvaro Carrillo (barítono)
Fuente: Prensa FundaMusical Bolívar.