La Sala Mendoza inicia sus actividades de 2012 con la presentación de tres muestras individuales de artistas contemporáneos con propuestas diversas entre sí. Luis Lizardo, Luisa Richter y Ramsés Larzábal inauguran el domingo 5 de febrero a las 11:00 de la mañana.
La Sala Mendoza, comprometida desde el año 1956 con el estudio y promoción de las prácticas artísticas contemporáneas, se complace en presentar Intervalos de Luis Lizardo, creador consolidado en el panorama plástico nacional. Se trata de un conjunto de obras sugerentes y sensoriales a través de las cuales el artista vela y devela imágenes que encuentran resonancias con trabajos anteriores pero que también permiten vislumbrar las preocupaciones estéticas –pictóricas, dibujísticas– por las cuales transitan las novedades de su quehacer plástico.
La exploración de diversos lenguajes, técnicas y soportes en el tratamiento de los temas de su imaginario evidencian el carácter investigativo y la necesidad de indagar nuevas formas de representación del hecho plástico, cuestión esencial que gravita en su universo creativo. “Las tintas, los dibujos, los recortes fotográficos de Luis Lizardo operan como intervalos, no sólo de esa imagen espectacular que nos abruma en la vida cotidiana, sino también del esfuerzo constructivo de la pintura, de su pintura. Son y se dan como intervalos, es decir, como distancias y diferencias, como anotaciones marginales, como juegos amantes en los que se pierden los límites y se desvanecen las fronteras, como escenas predispuestas a la paradoja, lo imposible, lo inadecuado, pero también a que el disfrute se haga visible, se convierta en presencia”, dice Sandra Pinardi, curadora de Intervalos.
La exhibición, ubicada en la Sala Principal, es posible gracias a la alianza con Carmen Araujo Arte, galería avocada al estudio y la divulgación del lenguaje visual contemporáneo. Este proyecto en conjunto ofrece una interacción productiva que beneficia especialmente al público, razón de ser de ambas instituciones.
La mezzanina de la Sala Mendoza es el espacio donde Luisa Richter presenta Collages, muestra que contó con la curaduría de Costanza De Rogatis; son collages en pequeños y medianos formatos realizados a partir de finales de los sesenta, cuyas imágenes, más que contraponerse, se integran sintetizando un todo. “Estar en presencia de sus collages es pues un ejercicio de descubrimiento: descubrimiento y asombro ante la incesante y enérgica necesidad de creación que se trasluce en cada obra, y con él, el descubrimiento de los saltos en el tiempo, en su tiempo, en este tiempo –fragmentos de pinturas e imágenes, trazos libres y gestos– que estructuran dialécticamente un nuevo espacio, no ya el del soporte, no ya el de la figura recortada sobre el fondo, sino el del creado, el ilusorio y aun así real de la composición, de la construcción visual”, afirma De Rogatis.
En palabras de la curadora los textos de Richter, también presentes en la exposición, denotan su espíritu reflexivo, cuyo ingenio da cuenta de su profundo compromiso con el arte, “pero es al verlos en conjunto, textos y collages, en sus diferencias, en sus recurrencias, en sus detalles, cuando se abre ante nosotros la comprensión que esa especie de Pangea de la que todos forman parte, es puramente vida. Es ahí cuando se izan las velas y la historia de Luisa sopla”.
La tercera individual se encuentra en La Librería: De boleros y algo más, de Ramsés Larzábal. Al reflexionar sobre este trabajo, Ricardo Bello, autor del texto curatorial, se remonta a los orígenes de la definición cuando, mucho antes de que la ciencia, la matemática o la física propusieran métodos de interpretación y conocimiento, ya los artistas brindaban a la sociedad la oportunidad de descifrar lo desconocido y proponer diálogos con el entorno. Ese contrapeso a la voluntad de organizar e interpretar el mundo ejercido por el arte se hace evidente en la exposición de Larzábal.
“El trabajo artístico y la obra de Ramsés no acepta linderos. La propia esencia de su oficio está llamada a explorar el mundo de objetos que nos rodean. Un mundo donde las cosas se han convertido en nuestra segunda naturaleza. Pertenecemos a una sociedad marcada por los objetos, que terminan apropiándose de nuestra sensibilidad sin pedir permiso, reduciéndola, marcando territorio y jurisdicción. Las piezas de Ramsés no aceptan esa limitación”, dice Bello, al tiempo que afirma que dichas imágenes no conducen a otra reflexión, no necesitan ser explicadas ni proponer una dinámica intelectual ajena al juego de sus formas.
Intervalos, de Luis Lizardo; Collages, de Luisa Richter y De boleros y algo más, de Ramsés Larzábal, estarán abiertas entre el 5 de febrero y el 15 de abril de 2012, con horario de visita de martes a viernes, de 8:30 am a 4:30 pm, sábados 8:30 a 3:00 pm y domingos, de 11:00 am a 3:00 pm.
A 55 años de su apertura, la Sala Mendoza continúa su trabajo de promoción del arte y la cultura contemporánea. El período actual plantea además otras perspectivas, alineadas con la tendencia de nuestro tiempo que involucra Espacios Expositivos con Universidades. Al estar integrada al campus de la Universidad Metropolitana, hoy la Sala Mendoza tiene la oportunidad de proponer exitosos proyectos y experiencias que dinamizan el vínculo entre la creación y el conocimiento.
Intervalos – Luis Lizardo
Collages – Luisa Richter
De boleros y algo más – Ramsés Larzábal
Inauguración: Domingo, 5 de febrero de 2012 – 11:00AM
Clausura: Domingo, 15 de abril de 2012
Lugar: Sala Mendoza, Edificio Eugenio Mendoza Goiticoa, Plaza del Rectorado, Universidad Metropolitana, Terrazas del Ávila, Caracas