La Junta Directiva Nacional del Colegio de Arquitectos de Venezuela, dando respuesta a los múltiples planteamientos que hemos recibido de nuestros agremiados sobre la construcción de la Sede del Museo Nacional de Arquitectura en el Paseo Vargas (Avenida Bolívar) de Caracas. Se dirige a la opinión pública para fijar posición ante este acontecimiento que a todas luces representa una clara VIOLACIÓN a la Ley de Protección y Defensa del Patrimonio Cultural en sus artículos 1, 2 y 23, al perjudicar los Valores Patrimoniales del Nuevo Circo de Caracas.
Considerando que el Proyecto del Museo Nacional de Arquitectura fue elaborado por el Profesor Juan Pedro Posani, quien a su vez funge también como Director de la Fundación Museo de la Arquitectura, podemos definirlo como un inexplicable exabrupto, ya que el Prof. Posani ha ocupado la Dirección del Instituto de Patrimonio Cultural y debe ser conocedor de la Ley de Protección y Defensa del Patrimonio Cultural de Venezuela.
La espantosa contradicción que representa esta nueva edificación al aspirar albergar el Museo Nacional de Arquitectura, es en si una descarada violación a la ley que protege el patrimonio arquitectónico, evidenciando también una clara burla a la ética profesional.
Por otra parte y como representantes del gremio de Arquitectos, debemos reclamar también que una obra de esta trascendencia no debe ni puede desarrollarse de la forma irresponsable que se ha hecho sin considerar el entorno y sus valores, sin ser llamado a concurso nacional y para colmo auto-otorgándose a dedo el Prof. Posani este importante proyecto.
Lamentamos que el proceso político que padece el país haya hecho perder el norte profesional del Prof. Posani, y que de forma absurda violente sus propios planteamientos, cuando ocupó la dirección del IPC.
Si la cordura pudiera retornar a los Arquitectos que hoy ejercen funciones públicas al servicio de esta “Revolución”, nuestro Colegio estaría sumado a contribuir para que todos aquellos proyectos de edificaciones públicas pudieran ser llamados a concursos no cuestionables.
Hacemos un llamado a la sindéresis, ya que aun puede ser tiempo para corregir tan grande daño patrimonial.
Fuente: Mitchele Vidal.
