Una Mirada al Mar, producida por la Villa del Cine y dirigida por Andrea Ríos se encuentra actualmente en las carteleras del país y supera los 85 mil espectadores en su décimo primera semana de exhibición.
Fernando Flores, actor de teatro nacional, internacional y televisión, con más de 30 años de experiencia, además de contar con un gran desempeño como locutor y productor, ha participado en numerosas y destacadas piezas teatrales tales como La Fiesta del Chivo, La visita que no tocó el timbre, Tierra Baja, entre otras.
Asimismo, Tres mujeres, El Sol sale para Todos, Niña Bonita y Carita Pintada fueron algunas de las telenovelas venezolanas en que el actor se vio destacado.
Este hombre de los escenarios televisivos y teatrales ha obtenido 3 importantes reconocimientos del mundo artístico: «Mara de Oro» (2 veces como mejor actor) y «Agueybana de Oro» (Puerto Rico). Ahora protagoniza Una Mirada al Mar.
– ¿Cómo fue el inicio en la actuación y su trayectoria?
Comencé muy joven. Yo nací en una provincia Argentina donde hice teatro en grupos independientes, fue una escuela muy bonita donde aprendes de actuación y te hace amarla y respetarla. Siento mucho respeto en la profesión actoral.
– ¿Cómo llegó el proyecto de la Villa del Cine?
Recibí una llamada telefónica. Tenía algo de conocimiento del proyecto, luego fui e hice el casting y ahí nació la propuesta. Cuando uno hace un casting nace una esperanza. Quedó esa semillita de esperanza, después me hicieron la llamada para que hiciera el papel de Rufino.
– ¿Cómo es Rufino? ¿Se parece a Fernando Flores?
Rufino se parece mucho a mí: es un artista, un pintor enamorado de su esposa, que lamentablemente se queda solo. Yo estaba pasando en ese momento una situación personal de alejamiento de mi familia y esa misma circunstancia me acercó mucho a Rufino.
– ¿Qué desafío en particular supuso interpretar a una persona solitaria como Rufino?
Los años. La dedicación te da esas facilidades que puedes entender muchas facetas de un personaje. El personaje lo sentía como si fuera yo, se parecía mucho a mí.
– ¿Qué reclama Rufino de la vida?
La vida de Esperanza, porque quien ama de la manera en que ama Rufino, no puede reclamar otra cosa que la vida del ser amado.
– ¿Cómo le resultó la experiencia de trabajar al lado de Andrea Ríos (Directora)?
Me llevé muy bien. Es una muchacha muy talentosa, ya vendrán más producciones, más películas donde ella podrá manifestar todo ese talento.
– ¿Cómo fue la relación con tus compañeros y especialmente con Yucemar Morales (Ana E.)?
Yucemar es una niña muy inteligente, se aprendía las letras rápido, de hecho, la coach le decía el parlamento una vez y ella ya estaba lista para grabar. Tiene un sentido del humor que muy pocos niños tienen, la actuación de ella fue deliciosa, da gusto trabajar con ella. Los demás niños también son buenos, es un triunfo del casting.
– ¿Cuál fue el aspecto más difícil de manejar sobre su personaje?
Una de las cosas difíciles es mantener esa concordancia de los momentos ya grabados con lo que se van a grabar. A veces la escena es al revés, es complejo, pero con la ayuda de la dirección y todo el equipo, las cosas pueden salir bien.
– ¿Qué valores considera que el público va a encontrar en Una Mirada al Mar?
Creo que la película va a dejar a mucha gente pensando ¿Qué estamos haciendo con los niños? Niños que están solos o no tienen futuro. Lo primordial es la reflexión en esos casos.
– ¿Cómo fue el trabajo con la Villa del Cine?
Fue un trabajo profesional. La película ha tenido una producción excelente dentro de lo que he visto. Creo que la Villa del Cine era una necesidad, para Venezuela por tener estos estudios de hacer cine, tiene gente muy valiosa, gente que no se consigue muy fácilmente como aquellos con la capacidad de camarógrafos-fotógrafos, iluminadores, etc.
– ¿Por qué el público debe ir a ver Una Mirada al Mar?
Yo pienso que primero debemos cuidar lo nuestro, apoyarlo, criticarlo si se da el caso y no pensar que todo lo que viene de afuera es bueno. Es un tema digno de ser apoyado.
– ¿Qué fue lo más divertido de Una Mirada al Mar?
Ana E. esa niña tiene un sentido del humor que no todos los niños tienen. Nunca, ni un día nos dejó de asombrar con sus chistes, su mirada. Ella fue lo más lindo de la película.
Fuente: Diogenis Jaspe Brandt.