En una coyuntura política y bélica como la que se vive hoy a nivel global, producto de las carencias energéticas del imperio, los países como Venezuela que cuentan con las más importantes reservas de petróleo, establecidas oficialmente por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), estarán permanentemente acosados. Los últimos acontecimientos en el Medio Oriente y África advierten que se debe estar preparado para enfrentar las agresiones imperiales.
En el marco de esa inquiuetud colectiva, se inaugura el jueves 28 de julio de 2011, a partir de las 7:00 p.m. en la Sala NG de la Fundación Celarg, la exposición “Arte, humor y política”, homenaje a Claudio Cedeño, con la participación de los artistas plásticos María Centeno, Peli, Emilio Agra, José Luis Garrido, Alfredo Lugo, Iván Lira y Frank Cisneros, quienes mostrarán dibujos antiimperialistas y anticapitalistas.
La defensa de la soberanía y la independencia es una batalla que debemos dar en múltiples terrenos simultáneamente. La creación artística, el ingenio y el humor son algunos de los instrumentos de combate que históricamente han estado presentes en las manos del pueblo. Con la presente exposición Arte, humor y política, la Fundación Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos, desde la Coordinación de Artes Visuales, rinde homenaje a Claudio Cedeño (1915-2009), pintor, caricaturista y luchador social. Su vida y su obra serán eternamente una referencia de calidad, constancia e integridad en el compromiso por las luchas del pueblo.
La exposición está planteada como la primera edición de un programa más ambicioso, a través del cual la Fundación Celarg, ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Cultura aspira llegar a otros sectores de la población creandoun circuito expositivo alternativo, que abarque a consejos comunales, centros asistenciales, espacios deportivos, redes socioculturales, escuelas y universidades. El área de trabajo demarcada inicialmente es la región capital, y en una segunda etapa las exposiciones circularán por las diferentes SalasComunitarias de Lectura, que organiza la Biblioteca “Isaac J. Pardo” de la Casa de Rómulo Gallegos en el interior del país.
A lo largo de la historia ha existido un desdén generalizado hacia la imagen humorística o incluso hacia la ilustración en general. Los historiadores del arte tradicionalmente han marginado este tipo de expresión, ya que la mayoría no ha sabido considerarlo como arte, al centrarse únicamente en las llamadas artes mayores (arquitectura, pintura, escultura). Al actuar así, señala Gombrich, desconocen el valor de las caricaturas como tratamiento de la imagen que no tendría diferencias con respecto a los retratos oficiales o los cuadros de un altar.
Sin embargo, desde que surgió la caricatura ha cumplido un papel fundamental como recurso de lucha política, en tanto lenguaje accesible a todo público, como eco de sentires compartidos, síntesis sencilla de ideas complejas, mordacidad y burla, expresión contentiva de posturas de clase, de ideología, a través de las cuales se construyen personajes que se enraízan en la memoria colectiva. A la vez requieren de una ejecución con recursos y destrezas expresivas, con el dominio de la línea, el dibujo y el color. Pero su verdadero objetivo es hacer reír, y ese es el gran reto.
Fuente: Prensa Celarg.